Comenzamos la segunda y última jornada de la Asamblea continuando y tratando de definir el precio de la cuota, aclarando los diferentes puntos del presupuesto presentado por el Consejo. Frente a la realidad que nos muestra el Comité por la que pasa nuestra Asociación nos hace pensar que realmente pagamos muy poco para lo que obtenemos, pero también vienen votos cerrados o realidades muy difíciles que hacen que discutamos si poner una cuota baja y eliminar muchas cosas del presupuesto, o hacer crecer nuestra asociación.
Me llamó la atención de que muchos grupos que viven duras realidades económicas, decidieron esta vez confiar en el consejo y otorgar el monto que solicitan para la cuota, a pesar de que van a tener que trabajar muy duro para conseguirlo. La mayoría felicita la actitud de nuestro Presidente Luis (Tute) Director Ejecutivo por su actitud de renunciar a su sueldo para que sea invertido en su departamento; a pesar de ello se da curso a la moción de que nuestro Presidente Director tenga que firmar un contrato de «trabajo solidario», de acuerdo a la recomendación legal del Abogado consultado por uno de los asambleístas.
El tema del presupuesto duró hasta las 15:00 hs, para votar de una manera absurda el valor de la cuota. Se presentaron 17 mociones con diferentes valores, diferenciándose algunas de otras por centavos y otras por grandes brechas de dinero, opciones de pago, sumas opciones, etc. En fin, una variedad de mociones a las que había que aprobar o derogar que prácticamente no se podían comparar unas con otras, para nada. Además de la inoperatividad de nuestro presidente para llevar adelante la votación, reconocida por él mismo, se sumó una constante interrupción de la votación y comentarios sin fundamentos o en pleno desconocimiento de los resultados que arrojarían nuevas e improvisadas formas de votar. En conclusión se eligió que todos los miembros de la Asociación deberán pagar $ 40 por todo un año sea beneficiario o dirigente. Personalmente estoy de acuerdo con el resultado, pero analizando la situación, el mismo realmente no refleja el monto promedio de las intensiones de los asambleístas, simplemente por la infundamentada forma de acordar una suma.
Terminando con la primera parte del día, votamos los nuevos cargos a medida que íbamos saliendo de la sala para ir a comer, siendo las 15:30 hs. Me llamó la atención la gran cantidad de votos impugnados, no sabría decir por qué.
Luego de almorzar retomamos la Asamblea. El comité decidió omitir y dejar sin efecto el punto de la cuota extraordinaria (les recuerdo que la cuota extraordinaria era la que establecía pagar a nuestra Asociación un 10% del costo total del campamento de fin de año de nuestros grupos).
El siguiente punto fue analizar si se terciarizaba o no la tienda Scout, donde fue el momento donde hablé por única y primera vez ante la asamblea; reconozco que fui demasiado honesto pero siempre basándome en lo que se habló en nuestra asamblea distrital; en ese momento podían ocurrir tres cosas: que aplaudieran, que hicieran como que no dije nada o que se quejaran. Aunque no me lo crean. los hermanos scouts ya aplaudieron a mitad de las palabras (también, las había preparado desde hacía horas). No fue la gran cosa, pero para ser la primera vez te pone nervioso la mirada de más de 100 asambleístas bastante buscadores de la quinta pata del gato.
Ahora, estoy en un café comunicándoles esto y será hora de descansar y pasear un poco. Gracias nuevamente y saludos a todo mi querido Distrito y Zona. Una joyita más: “El operador se ha levantado porque es humano, y tiene necesidades fisiológicas” – Presidente Scouts de Argentina.